Nuestro cerebro produce impulsos
eléctricos (potenciales de acción) que viajan a través de nuestras
neuronas. Estos impulsos eléctricos producen ritmos que son conocidos
como ondas cerebrales. Los impulsos eléctricos son información que viaja
de neurona a neurona haciendo uso de cientos de miles de ellas para
lograr transportarse y ejecutar una función determinada.
La actividad de las ondas cerebrales puede ser observada con un electroencefalograma o EEG.
La actividad de las ondas cerebrales puede ser observada con un electroencefalograma o EEG.
Desde la invención del EEG se han
producido numerosas investigaciones que han estudiado la relación entre
las ondas cerebrales y los diferentes estados de conciencia. Sabemos que
los diferentes patrones de ondas cerebrales se relacionan
biyectivamente con diferentes estados de consciencia, tales como
concentración intensa, estado de alerta (despierto), sueño profundo,
sueños vívidos, somnolencia, relajación, hipnosis, estados alterados de
conciencia, etc.
Existen cuatro tipos principales de
ondas cerebrales: alfa, beta, theta y delta. A continuación se describen
estos diferentes tipos de ondas cerebrales, en orden de mayor a menor
actividad:
Ondas Beta
Se producen cuando el cerebro está
despierto e implicado en actividades mentales. Son ondas amplias y las
de mayor velocidad de transmisión de las cuatro. Su frecuencia oscila
entre 14 y 30-35 Hz (ciclos por segundo o cps). Denotan una actividad
mental intensa. Cuando una persona está dando un discurso, estudiando,
realizando un problema de matemáticas, etc. su cerebro se encuentra
emitiendo este tipo de ondas.
Ondas Alfa
Alfa representa un estado de escasa
actividad cerebral y relajación. Estas ondas son más lentas y de mayor
amplitud que las beta. Su frecuencia oscila entre 8 y 14 cps. Una
persona que ha terminado una tarea y se sienta a descansar, se encuentra
a menudo en un estado alfa; así como la persona que está dando un
paseo, disfrutando del paisaje.
Ondas Theta
Son ondas de mayor amplitud y menor
frecuencia (entre 4 y 8 cps). Se alcanzan bajo un estado de calma
profunda. La persona que está fantaseando (o soñando despierta), se
encuentra en este estado, así como la persona que tras conducir un rato,
de repente se da cuenta de que no recuerda como ha hecho los últimos
kilómetros. Se dice que es un estado de inspiración de ideas y
soluciones creativas. Se trata de un estado en el que las tareas
realizadas se han automatizado, ya no se necesita tener un control
atencional y consciente de su ejecución, pudiendo el sujeto distanciarse
de ellas mentalmente. Es decir, que su mente esté en “otro sitio” (a
veces decimos “en la luna”).
Ondas Delta
Son las ondas de mayor amplitud y menor
frecuencia (entre 1,5 y 4 cps). Nunca llegan a cero, pues eso
significaría la muerte cerebral. Se generan ante un estado de ‘sueño
profundo’.
Cuando nos vamos a dormir, las ondas
cerebrales van pasando sucesivamente de beta a alfa, theta y finalmente,
delta. Durante el sueño se producen ciclos que duran unos 90 minutos.
Cuando una persona despierta de un
sueño profundo, la frecuencia de sus ondas cerebrales se va
incrementando progresivamente, pasando de delta a theta, luego alfa y
finalmente, beta. Durante este proceso de despertar, no es extraño que
una persona permanezca en un estado theta durante un tiempo (por
ejemplo, unos 15 minutos). Esto le permitirá tener un libre flujo de
ideas, lo cual puede aportarle soluciones, ideas nuevas o nuevos puntos
de vista, siendo este un estado especialmente creativo y productivo
Las investigaciones han mostrado que
aunque un estado cerebral puede predominar en un momento dado, los tres
tipos de ondas restantes están también presentes en todo momento. Es
decir, mientras una persona está implicada en una actividad mental,
produciendo ondas beta predominantemente, las ondas alfa, theta y delta
se están produciendo también, aunque sólo estén mínimamente presentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario